Y lo hace muy bien. No hay una plataforma que se estruje el cerebro tanto como Linkedin para sacarle el mayor partido posible a la cultura del reconocimiento.
Porque la información es poder. Y el reconocimiento, también. La información sobre el reconocimiento obtenido es ya...engadgement puro y duro.
Yo valido. Tu validas. Y mientras conjugamos el verbo, tejemos una red invisible de networking positivo. Hace unos meses recibí un tuit donde se me preguntaba por qué le otorgaba importancia a este tipo de dinámicas lúdicas. La respuesta es sencilla....
- ¿A quién le amarga un dulce de refuerzo positivo?
Perdón, no está bien planteada....
- ¿A quién le amarga cientos de dulces de refuerzo positivo a tus competencias, a lo largo del tiempo?
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